Se realiza en forma manual y los recolectores eligen sólo las bayas que se encuentran maduras. Se trata de un sistema costoso, pero así se obtiene un café de gran calidad.

Consiste en abrir los frutos, limpiarlos para obtener los granos de café y luego secarlos. Existen dos métodos para procesar las cerezas de café recolectadas: el método seco y el método húmedo.

Una vez que se obtiene el café verde se clasifican los granos de forma manual o con máquinas especiales para dejar solamente los granos buenos y del mismo tamaño. Se obtienen así granos de máximo nivel, listos para ser tostados y comercializados

El proceso de tostado se realiza para que los granos pierdan su humedad y liberen los aceites distintivos que dan el sabor y el aroma al café. Además, los granos se agrietan en el medio y adquieren su forma característica.